En un jardín que se precie no pueden faltar plantas tan conocidas como son las tillandsias. Existen gran variedad de tillandsias y de numerosos colores que aportarán a tu jardín el toque especial que necesita.

Las tillandsias son plantas aéreas que crecen en estado natural por encima de otras plantas y árboles sin llegar a parasitar. Principalmente se dividen en dos grupos: las de colores verdes y las grises. Para poder extender estas plantas por tu jardín, necesitarás saber cómo reproducirlas. En este post vamos a enseñar cómo se debe reproducir una tillandsia. ¿Quieres saber más?

Técnicas de reproducción de una tillandsia

La reproducción de las tillandsias, al igual que el resto de las bromeliáceas, se puede hacer mediante dos técnicas: o bien por semillas o bien por división de la mata.

Reproducción por semilla de las tillandsias

La reproducción por semilla es la forma más natural que tienen las plantas para reproducirse. Suele hacerse en tres etapas: primero crecen hasta la maduración en la que florecen, segundo polinizan y por último se producen las semillas y vuelven a germinar.

Las tillandsias necesitan del polen de otra planta de la misma especie para poder fecundarse. No son capaces de auto fecundarse a sí mismas. La ventaja de esta necesidad es el enriquecimiento genético dado que hay un mayor cruce entre ejemplares de la misma especie.

Aunque este método es eficaz, no es el que emplean los aficionados a la jardinería, sino que es utilizado por los cultivadores profesionales.

División de mata de la tillandsia

Esta división también es llamada por esquejes. Consiste en arrancar una rama que crece de la planta madre después de la floración. A esta rama se le llama hijuelo. Cada tillandsia puede generar varios hijuelos que pueden, posteriormente, ser cuidados y desarrollados aparte en otro lado o bien dejarlos juntos a la planta madre. Aportando los cuidados básicos a los hijuelos podremos formar una colonia de tillandsias en el jardín en poco tiempo, puesto que no tenemos que esperar a que la planta germine desde cero.

Muchas especies de tillandsias mueren cuando termina el periodo de floración. Sin embargo, durante ese periodo es cuando más cantidad de hijuelos son capaces de desarrollar. Es importante aprovechar la producción de hijuelos en la fase de floración para actuar sobre la reproducción y aumentar nuestra colonia.

Una vez se han plantado los hijuelos, tendremos que esperar varios años hasta que vuelvan a florecer y a producir nuevos hijuelos.

Requerimientos reproductivos

Ya que las tillandsias son plantas aéreas y no requieren de sustrato ni suelo, necesitaremos una pequeña base de silicona o un pegamento que no sea acuoso y soluble que nos sirva para la fijación. Esta especie de adhesivo se aplican en la base de la planta para fijarlas en aquellos lugares donde queramos colocar nuestra colonia de tillandsias.

Una vez los hijuelos comienzan a crecer, debemos tener en cuenta algunos factores para que su desarrollo sea el adecuado y puedan florecer cuanto antes:

  • Luz: lo ideal es colocarlos a semisombra, sobre todo en verano, ya que el sol directo puede dañar sus hojas. Además requieren de una buena aireación.
  • Riego: Estas plantas necesitan ser regadas por pulverización unas 3 veces en semana en invierno y a diario en verano. Se debe esperar a que se sequen un poco entre riego y riego para evitar la putrefacción.
  • Temperaturas: Son muy sensibles a las heladas. Su temperatura ideal ronda entre los 10 y 32 grados.
  • Alimentación: Puede rociar un poco de fertilizante pulverizado cada dos semanas en verano y primavera y cada cuatro semanas en otoño e invierno.

Con estas indicaciones podrás tener tu colonia de tillandsias que aportarán el toque especial que necesita tu jardín.