Es bastante probable que no te suene de nada el jabón negro, pero en el continente africano su uso está muy extendido ya que posee muchos beneficios para el cabello y la piel. El jabón negro es también una de las piezas claves de la cosmética marroquí, que viene siendo utilizado desde hace muchos años. Lo positivo del jabón negro es que se puede preparar en tu propio hogar de manera casera, ya que se trata de un cosmético artesanal fácil de hacer. Debido a esto, también tiene muy buena reputación dentro del mundo de la cosmética ecológica. No en vano, el jabón negro no está compuesto de ningún tipo de elemento que provenga de un animal, ni tampoco posee colorantes ni productos que puedan ser perjudiciales para nuestro cabello o nuestra piel.
Como hemos comentado anteriormente, gracias a la cosmética marroquí sabemos que el jabón negro es ideal para tratar y reparar nuestro cabello dañado o para mantener saludable nuestra piel. Pero, también puede ser un excelente aliado para eliminar los problemas de acné que tanta gente sufre, para regular la grasa de la piel, evitando la acumulación o la eliminación total de esta. Por otra parte, también se ha comprobado que su aplicación no solo ayuda al pelo, sino que también ayuda a reparar el cuero cabelludo y por tanto eliminar molestos picores o problemas de caspa.
A continuación te explicaremos como puedes preparar tú misma esta reliquia de la cosmética natural marroquí en tu propia casa. El método de preparación es sencillo, y los ingredientes necesarios pueden ser aquellos que tengamos por casa, o en caso de que nos falte alguno podremos encontrarlo de manera rápida en cualquier tienda donde se vendan elementos de cosmética ecológica.
COMO HACER JABÓN NEGRO EN CASA
Los ingredientes a utilizar para la preparación del jabón negro son, cascaras de plátano, algún aceite esencial de nuestra preferencia, agua (preferiblemente agua destilada), y por último, manteca de karité. Esta manteca puede ser el único ingrediente que tengamos que adquirir si no disponemos de él.
Para la correcta elaboración del jabón negro vamos a seguir los mismos pasos que se realizan en la cosmética marroquí desde hace años, y que han hecho que este producto sea tan característico y popular como es hoy en día. Lo primero que vamos a hacer es coger las pieles de los plátanos y quemarlas hasta que se reduzcan prácticamente a ceniza. Una vez que tengamos las cenizas, tendremos que añadirlas al agua y mezclarlo todo correctamente.
Por otra parte, vamos calentando la manteca de karité hasta derritirla. Es importante que no se queme por eso nosotros te recomendamos que lo hagas al baño maría.
Una vez que la manteca está completamente derretida tendremos que añadirle el agua con las cenizas que preparamos previamente.
Lo siguiente es agregarle a la mezcla aquel aceite esencial de nuestra preferencia, que más nos guste, y a continuación dejarlo enfriar para finalmente ponerlo en un molde y dejarlo endurecer durante más de una semana para posteriormente ya poder proceder a utilizarlo correctamente.
Hay otro tipo de jabón negro que para su fabricación se utiliza aceite de oliva, pulpa de aceitunas negras maceradas en sal y potasa (obtenida de cenizas vegetales como en el caso de las cáscaras de plátano). El proceso de fabricación es similar al comentado anteriormente, simplemente cambia la base de manteca de karité por aceite de oliva.
Cuéntanos tu experiencia con el jabón negro, ¿cómo lo haces?